LA LUCHA POR LA LIBERTAD Y LA IGUALDAD DESDE LA INFANCIA

El Día de la Independencia es una fecha que tiene un gran contenido emocional e histórico ya que conmemora la libertad y la soberanía de nuestra Nación. En diferentes partes del mundo, esta celebración se asocia con la conquista de derechos fundamentales y la lucha por la igualdad de hombres y mujeres, pero nos queremos centrar en los derechos de la infancia, resaltando la importancia de garantizar un futuro libre, justo e igualitario para las generaciones que nos sucedan.
Al declarar su independencia, las naciones buscan asegurar la autonomía y la capacidad de autogobernarse. Del mismo modo, los derechos infantiles son fundamentales para el desarrollo pleno y la autonomía de los niños/as. Estos derechos garantizan su protección, educación, salud y también el derecho al ocio y al tiempo libre para jugar, promoviendo su desarrollo integral.
Debemos asegurar que todos los niños/as tengan acceso a una educación de calidad, atención médica adecuada y un entorno seguro, amoroso y facilitador.

Muchas veces los adultos y en especial los dirigentes politicos se olvidan que la infancia es parte fundante de una sociedad, sin pensar que su participación es esencial para garantizar una sociedad inclusiva. Fomentar la autonomía desde temprana edad posibilita no solo un crecimiento sano sino también la construcción de un sujeto activo y consciente.
Garantizar el respeto de los derechos de todos los niños/as permite romper los ciclos de aislamiento y desigualdad, brindándoles la oportunidad de desarrollarse plenamente en especial a aquellos que por su condiciín de diversidad no pueden hacerlo sin apoyos.

Los que integramos TERCER TIEMPO pensamos que el Día de la Independencia nos permite compartir un objetivo común: la lucha por la libertad y la igualdad en la vida cotidiana. Garantizar y promover los derechos de las infancias es un paso fundamental para construir un futuro donde la libertad y la igualdad sean pilares fundamentales de una sociedad independiente.